Hotel Exe Cristal Palace

El Hotel Exe Cristal Palace se encuentra en el corazón de Madrid, en la calle Hortaleza 52, en el famoso barrio de Chueca. Este animado vecindario es conocido por su ambiente cosmopolita y multicultural, repleto de restaurantes, tiendas de diseño y vida nocturna vibrante. La zona es segura y bulliciosa, perfecta para sumergirse en la cultura madrileña.

A escasos 500 metros del hotel se encuentra la estación de metro Gran Vía (Línea 1 y Línea 5), a 15 km del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas y a poca distancia caminando del Museo del Prado y la Puerta del Sol.

El edificio cuenta con ocho plantas y un elegante estilo neoclásico que destaca en medio de las calles madrileñas. Construido en el año 1973, sus acabados combinan mármol, madera y acero tanto en zonas comunes como en las habitaciones. El diseño interior es moderno y funcional, ofreciendo una atmósfera acogedora y sofisticada.

Las habitaciones varían en tamaño desde los 20m² hasta los espaciosos 40m², todas ellas elegantemente decoradas y equipadas con comodidades modernas. Algunas tienen vistas panorámicas a las calles históricas de la ciudad.

El restaurante del hotel, inaugurado en 1985, ofrece una exquisita fusión mediterránea que deleitará incluso a los paladares más exigentes. A pocos pasos se encuentra también un reconocido restaurante especializado en cocina internacional.

El bar del Hotel Exe Cristal Palace es el lugar ideal para disfrutar de exclusivos cócteles y vinos seleccionados. Su cuidada carta satisfará los gustos más refinados.

Entre sus servicios destacan una piscina cubierta, spa, gimnasio totalmente equipado, salas de reuniones para eventos profesionales, parking privado e conexión Wi-Fi gratuita para todos los huéspedes.

Este hotel es perfecto tanto para parejas que buscan escapar juntos como para familias que desean explorar la ciudad. Con precios desde X euros por noche, ofrece una excelente relación calidad-precio.

Con una valoración media de excelencia por parte de sus huéspedes,reales resaltan la comodidad de las habitaciones, la ubicación céntrica y el servicio impecable del personal.
La fachada del edificio combina elementos neoclásicos con toques modernos que lo hacen único dentro del panorama arquitectónico madrileño.